Revalorización de Bitcoin, parásitos del sistema, regulaciones de los gobiernos y tokenización de ar
«Las Noticias de la Comunidad» (semana del 2 al 8 de julio de 2018)
La cosa está que arde esta semana en el panorama crypto nacional e internacional. Mientras el fundador de Ethereum Vitalik Buterin espera que las bolsas centralizadas se quemen en el infierno y los inversores comienzan a dar la espalda al oro como refugio de valor, parece que los inversores institucionales podrían duplicar el precio de Bitcoin, a pesar de que se ha detectado un malware que afecta a más de dos millones de direcciones de criptomonedas, que se ha triplicado el robo de criptomonedas en lo que va de año, que han muerto más de ochocientas criptomonedas y que las autoridades estadounidenses han confiscado doce millones de dólares en Bitcoins. Por su parte, el ejército ruso construye un laboratorio de investigación blockchain para mitigar los ataques de ciberseguridad.
Además, un informe realizado por CASE (Center for Social and Economic Research) para el Comité sobre Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo argumenta que las transacciones con criptomonedas resultan relativamente seguras, transparentes y rápidas, y que tienen buenas perspectivas para ser desarrolladas en el futuro. También se ha llevado a cabo con éxito la primera votación municipal local basada en blockchain en la ciudad suiza de Zug, y GMO ha presentado un equipo para minería de Bitcoin de 33 TH/s de potencia, el más poderoso hasta la fecha. Pero no sólo mejora la potencia de minado, donde se ha logrado a su vez un máximo histórico: también se han lanzado dos propuestas (Schnorr y BLS) para mejorar la criptografía de Bitcoin, y la cadena lateral de Liquid permitirá crear tokens privados asegurados en Bitcoin.
Por otro lado, nueve entidades bancarias han lanzado una red blockchain europea. Se trata de We.Trade, una plataforma digital para impulsar los negocios entre empresas en tiempo real mediante blockchain. Las entidades implicadas en el proyecto son Santander, Deutsche Bank, HSBC, KBC, Natixis, Nordea, Rabobank, Société Générale y UniCredit. Al mismo tiempo, la bolsa de Suiza lanza su propia casa de cambio de criptomonedas, mientras que la CNMV suaviza la normativa para retener en España las emisiones de criptos.
Y no sólo eso: Hong Kong continúa las regulaciones para convertirse en un centro internacional de blockchain, Malta aprueba tres proyectos de ley sobre blockchain y criptomonedas, y Uzbekistán emite un decreto para acelerar la legalización de las criptomonedas.
En las paradisiacas islas donde habito, los representantes de AMODICA (Asociación de Monedas Digitales de Canarias) se han reunido en Tenerife con la directora de la Agencia de Atención al Inversor de la Zona Especial Canaria (ZEC) para hablar de las ventajas que traería para la ZEC y para toda Canarias conseguir que las Islas se conviertan en un ecosistema amigable con Bitcoin y blockchain.
Pavel Karpíšek, Olga Martín e Ignacio M. García Medina, negociando para transformar Canarias en un territorio amigable con la blockchain.
En lo que respecta a las curiosidades semanales, destacar el perfume de Bitcoin que fabrican en el Pirineo de Lleida para el público asiático, la posibilidad de comprar un Ford Mustang clásico con criptomonedas o el acuerdo de Pornhub con TRX, con la que los usuarios ya pueden pagar en su servicio. También se ha anunciado el lanzamiento de la plataforma GANA, que conjuga blockchain e inteligencia artificial al servicio de la industria del cannabis. Asimismo, ya es posible rastrear la procedencia del pescado fresco gracias a la blockchain. Por lo demás, al contrario de lo que ocurre en otros países, un estudio revela que en India las mujeres invierten el doble en criptomonedas que los hombres.
En el apartado deportivo, Atlético Paranaense y Corinthians usarán criptomonedas para pagar el salario de sus futbolistas, y Fernando Alonso protege su imagen con la blockchain. Por su parte, Kirik permite realizar apuestas con criptomonedas sobre los resultados de la Copa del Mundo.
En el ámbito de la cultura destaca la tienda de arte Lynx Art, cuyas ventas crecieron un 427% por los pagos con criptomonedas, y la aparición de Tracer, la plataforma de emisión de entradas que da más poder a los músicos, evitando la reventa. Además, se ha anunciado el lanzamiento gratuito, en formato pdf, de El Libro de Satoshi, traducción de la famosa obra de Phil Champagne, que recoge los escritos e intercambio de opiniones realizadas por Satoshi Nakamoto a lo largo de dos años. La obra ha sido posible gracias al trabajo de parte de la comunidad, entre quienes destacan grandes profesionales como Álex Viñas, Íñigo Molero, José Antonio Bravo o José Manuel Arenillas, una iniciativa de Blockchain España, que consiguió el permiso para traducirlo pero no cuenta con los derechos para su publicación en papel.
Por lo demás, Blockchain Media, el sitio para la reflexión y el seguimiento del proceso de descentralización de las industrias culturales y creativas, organiza el próximo día 17 en Madrid el encuentro «Singular DTV: cómo vivir de tu trabajo creativo en la economía blockchain». El objetivo del mismo es difundir la manera en que la blockchain puede ayudar a cineastas, músicos, pintores, fotógrafos, periodistas, editores, publicistas, consumidores y, en definitiva, a todos los creadores, a desarrollar sus proyectos, eliminando intermediarios y convirtiéndose en gestores de su propia economía.
Y llegamos a la comunidad de usuarios, donde esta semana han abundado más las discusiones políticas entre quienes creen en la conveniencia de eliminar al Estado y quienes defienden la necesidad de servicios públicos pagados con el dinero de los contribuyentes, al tiempo que los partidos políticos se plantean incorporar blockchain en la Administración Pública española. Sin embargo, no todos están de acuerdo en que en el universo blockchain exista actualmente una verdadera comunidad. En su artículo «Cinco mitos de ‘blockchain’ que debes conocer para entender su presente», Álex Preukschat, coordinador del libro Blockchain: la revolución industrial de Internet, afirmaba que «el concepto de comunidad en blockchain no existe, a no ser que quisiéramos denominar comunidad a grupo de interés que utiliza los incentivos económicos para relacionarse, que es la dinámica dominante en el mundo blockchain de la actualidad. En su origen más purista comunidad blockchain representaba para muchos un interés por una tecnología que podría permitir recrear modelos sociales más justos y descentralizados. La subida de los precios de los criptoactivos ha diluido este concepto original de comunidad y quizás tengamos que esperar, tras una larga y pronunciada bajada de los precios, para volver a hablar de comunidad de la forma en que ya la hemos vivido en el pasado».
En mi opinión, esa comunidad sigue existiendo, y creciendo, cada vez más cohesionada, aunque en apariencia pueda mostrarse diluida tras el fervor especulativo de la mayoría. A modo de reflexión, reseñar la pregunta que nos planteaba Ramón Quesada: «¿Vas a dejar que los "grandes" se lo monten a su antojo, para repetir el ciclo, pero con algo más moderno, o, por el contrario, vas a participar como individuo, replantear la estructura y actuar en consecuencia, haciendo lo que crees correcto a tu juicio y en beneficio del futuro de tus hijos y de los hijos de los demás?». Yo, por mi parte, lo tengo claro. ¿Y vosotros? ¿Seguimos chupando del bote institucional, o colaboramos entre todos hasta exterminar a todos los parásitos que hacen enfermar al sistema global?
«Los parásitos más efectivos —o virus— son aquellos que engañan al cuerpo conduciéndolo hacia la indiferencia. Nuestros sistemas inmunitarios están diseñados para atacar a las sustancias ajenas que se introducen en el cuerpo, aislándolas y matándolas. Tememos al VIH y el cáncer en particular porque son capaces de puentear nuestro sistema inmunológico. La misma técnica es utilizada por los parásitos intelectuales para deshabilitar el sistema defensivo de aquellos de los que se aprovechan» (Comportamiento preferible universalmente: demostración racional de una ética seglar, de Stefan Molyneux, traducido por Pedro Romero).